martes, 21 de septiembre de 2010
Ahí, en el pico del monumento yo ví un agua cristalina, un puente enorme y mucha gente que amaba a horrores. Yo recien llegada, no sabía si estaban locos, me sentía rara y después de un tiempo pude gritar: Rosario es como una mariposa, es extrovertida y hermosa. Rosario me ha enseñado que el amor no es en vano, y estoy orgullosa de decir Rosario es la cuna de mi amor.
Allí, al lado de barcos y de plazas hermosas yo conocí a lo que hoy es mi novio, y sí, Rosario me dió su beso, me dió su abrazo y en otro lado no me hubiera animado a gritar: Rosario es como una mariposa, es extrovertida y hermosa. Rosario me ha enseñado que el amor no es en vano, y estoy orgullosa de decir Rosario es la cuna de mi amor.
Y ahora, en el tren no te olvido, no te puedo dejar de ver, necesito tu abrazo para poder decír: ROSARIO ES LA CUNA DE MI AMOR.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario